Han pasado ya ocho días desde las elecciones y Yumbo sigue inundado de publicidad política. Muchos candidatos no acataron la norma que les daba plazo hasta el martes pasado (1 de noviembre), a las 4:00 p.m., para desmontar la propaganda, por lo cual la Secretaría de Gobierno, en cabeza de Jesús Antonio Copete, podría imponer multas de hasta cinco salarios mínimos por cada elemento encontrado.
Ahora es cuando los ciudadanos podrán darse cuenta de qué tan serio es el compromiso de los candidatos -independientemente de que hayan sido elegidos o no-. Si sus compromisos fueron ciertos, deberían empezar por organizar a sus seguidores para limpiar la ciudad de propaganda política.
Lo que dice la Ley:
La propaganda electoral deberá ser retirada por los representantes de los partidos, movimientos políticos y/o candidatos y/o firmas publicitarias que hayan sido autorizadas por el Departamento Administrativo de Planeación Municipal, dentro de las 48 horas después de cerrados los respectivos comicios.
Queda totalmente prohibido pegar afiches o carteles en árboles, postes de apoyo de redes eléctricas y telefónicas, puentes, torres eléctricas, zonas que sean espacio público y cualquier estructura de propiedad del Estado.
Es cierto, la contaminación visual es abrumadora, compromiso se necesita aunque sea de los electos…..