Por Luis Ángel Martínez Á.
El pasado domingo 26 de agosto se llevó a cabo a nivel nacional la consulta popular “Anticorrupción”, la cual obtuvo algo más de once millones seiscientos mil votos; sin embargo, esta votación no fue suficiente para ser considerada una decisión obligatoria del pueblo, como lo exige la Ley, por cuanto se necesitaban más de doce millones ciento cuarenta mil votos.
La Consulta Popular es un mecanismo de participación ciudadana establecida en el artículo 103 de la Constitución Política y reglamentada por el artículo 8 de la Ley 134 de 1994, mediante la cual, una pregunta de carácter general sobre un asunto de trascendencia nacional, departamental, municipal, distrital o local, es sometida por el Presidente de la República, el gobernador o el alcalde, según el caso, a consideración del pueblo para que éste se pronuncie formalmente al respecto. En todos los casos, la decisión del pueblo es obligatoria.
Advierte el artículo 54 de la Ley 134, que se entenderá que ha habido una decisión obligatoria del pueblo, cuando la pregunta que le ha sido sometida ha obtenido el voto afirmativo de la mitad más uno de los sufragios válidos, siempre y cuando haya participado no menos de la tercera parte de los electores que componen el respectivo censo electoral. La tercera parte del censo electoral actual es de 12.140.342; es decir, estos eran los votos que necesitaba obtener la consulta popular Anticorrupción para que el Congreso de la República adoptara las medidas para hacerla efectiva.
Aunque la jornada del domingo 26 de agosto es considerada por algunas personas como un hecho histórico, por cuanto millones de ciudadanos salieron a votar por la consulta para demostrar que están en contra de la corrupción, otras personas consideran que fue un fracaso por no haber obtenido los votos necesarios. Además, consideran que para hacer esta demostración no era necesario gastarse trescientos cincuenta mil millones de pesos, ¿acaso se conoce de algunas personas que esté de acuerdo con la corrupción?
Claro, ahora, para justificar este gasto, sus promotores celebran los resultados y dicen que, aunque la consulta no se aprobó la jornada fue un éxito, lo cual nos hace recordar la frase célebre del filósofo del fútbol Francisco Maturana, quien para justificar también los malos resultados de la Selección colombiana de fútbol en su momento manifestó que “perder es ganar un poco”.
Luis Ángel Martínez Ángel, escritor y profesional yumbeño. Abogado, criminólogo, politólogo; autor de los libros: “Mecanismos de Participación Ciudadana” y “Derechos y Deberes Fundamentales”; profesor universitario y Defensor Público de la Defensoría del Pueblo, Regional Cali.
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