El sábado 25 de enero de 2014, Edward en su casa materna en Bellavista no podía creer lo que su mamá, con la respiración entrecortada por la emoción y encaramada en una moto, le estaba diciendo:
–¡Mijo, baje rápido al parque que se acaba de ganar la casa que rifó el Súper!
Doña Blanca Nidia Ipiales fue una de las muchas yumbeñas, las unas solas, las otras acompañadas por sus esposos, compañeros, novios e hijos, es decir, las familias yumbeñas, que desde temprano se ubicaron en la plaza cívica Fray Peña en el costado oriental del parque, donde el Supermercado Belalcázar había montado una gran carpa (por si de pronto llovía en esa fría noche de sábado) y dispuesto centenares de sillas plásticas para que quienes querían presenciar el sorteo de la casa estuvieran cómodos.
Edward Valencia Ipiales no pudo ir con su mamá hasta el parque; se quedó en casa con su esposa, Leidy Prado, viendo televisión porque su hija menor, Valery Samantha, estaba indispuesta, y con los tres añitos que tiene, lo mejor era no ventiarla, dice Edward. Ni siquiera sintonizó a Yumbo Estéreo 107.0 FM, por donde Germán Candelo iba relatando lo que ocurría en el parque, cada vez más lleno de yumbeños ansiosos de ser uno de ellos el feliz ganador. Por eso Edward, cuando logró entender lo que su mamá, casi que a gritos le contaba, no podía creerlo.
Al principio, cuando doña Blanca Nidia llegó en la moto del transportador informal y mientras le pagaba los mil pesos del pasaje, Edward pensó en que algo malo había pasado. Es que uno no está preparado para estas cosas: qué me iba a imaginar yo que fuera a ser el ganador de la casa; además, eso siempre le llega al que ya tiene…
Nosotros nunca pensamos que esa casa nos la fuéramos a ganar, dice Leidy. Sin embargo, ellos sí querían tener una en el sector de Finlandia. Cuando pasábamos en la moto, yo le decía a Edward qué bueno tener una casita de estas, tan bonitas… Edward para sus adentros pensaba: ¡Cuándo será ese cuándo! El presupuesto no le daba sino para pagar arriendo, y eso que en apartamentos pequeños porque pensar en tener una casa, eso era imposible.
Por la mente de Edward, rápidamente pasaban todos esos recuerdos, de los que lo sacó su mamá Blanca Nidia cuando lo apuró para que se fuera hasta el parque Belalcázar a ver si era él quien se había ganado la casa. Aunque no estaba plenamente segura, porque el nombre que leyó William García, el delegado de la Secretaría de Paz y Convivencia de Yumbo para supervisar el sorteo, en el cupón ganador era el de un tal Eduardo Valencia Ipiales, y Valencia Ipiales sólo hay uno, y ese es usted, mijo, así es que corra, váyase hasta el parque que yo me quedo cuidando la niña…
Con el corazón que le latía a mil, Edward prendió la moto y salió en compañía de Leidy y su hijo mayor, Juan David, de cinco años. Temoroso de que no fuera cierta la noticia que su mamá le había dado y que presuroso lo hizo llegar al parque, con timidez se acercó a la tarima, dio su número de cédula y anunciaron oficialmente que había llegado el feliz ganador de la casa.
Instalados en su casa desde el mismo lunes 27 de enero
Edward Valencia Ipiales lleva tres años y medio laborando en Vitocsa, Vidrios Templados de Occidente S.A, una empresa que queda en Arroyohondo, y allá, congratulados con la noticia de que a uno de sus empleados le había sonreído la fortuna, le dieron dos días de permiso. Por eso él pudo ir el lunes en la mañana al Supermercado Belalcázar para reclamar oficialmente el premio, acompañado de Leidy y Valery Samantha quien a su corta edad no entiende de la alegría de sus padres pero por igual se siente feliz, tal como lo estuvo su hermanito, Juan David, el sábado anterior en la noche. Juan David no estuvo en la entrega de la casa porque estaba estudiando en la Kennedy donde adelanta su pre-escolar, pero igual ha sido testigo de la felicidad que embarga a sus padres desde el sábado y de la que aún no salían cuando lo recogieron en la escuela y no lo llevaron para donde su abuela sino para la nueva casa.
Con Miguel Sánchez Guapacha, uno de los administradores del Supermercado Belalcázar, Edward, Leidy y Valery fueron hasta la Urbanización Flor de Montenegro a recibir la casa N° 5 de la Manzana O, es decir, la de la dirección calle 1 Oeste N° 3DN-30, la misma que desde la moto veía Leidy. En el sitio Edward le dijo a Miguel que el trasteo quedaría para después porque no tenía con qué pagar el transporte de las pocas cosas que tienen. Miguel, entonces, le ofreció uno de los carros del Supermercado para que se pasara de una vez a su nueva casa.
En la mañana de ese lunes 27 de enero de 2014 en Bellavista, en la carrera 9N, doña Blanca Nidia Ipiales vio salir a su hijo Edward con su esposa Leidy y su nieta Valery rumbo al centro de Yumbo. Y pensó en sus cinco hijos que tuvo con su finado esposo, Jesús Eudoro Valencia, desde el mayor que vive en Buenaventura hasta la menor, la única hija mujer, cada uno con sus responsabilidades a cuestas. Cinco hijos que terminó de criar trabajando por ratos en casas de familia, trabajo que aún hace.
El único que la acompañaba era Edward, quien se pasó a vivir a la casa materna desde hace varios meses cuando tuvo que entregar el apartamentico que los dueños tumbaron para construir uno más grande. Doña Blanca Nidia, viendo partir a su hijo, su nuera y su nieta, sintió de nuevo entrecortada su respiración, esta vez no de temor porque de pronto su hijo no fuera el ganador, sino de emoción porque el sueño de su hijo de tener su casa propia ya estaba cumplido.
Por Juan de Dios Vivas-Satizábal, director www.todosesupo.com.
Comentario de Germán Cárdenas publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
¡Juan de Dios, me sacaste unas lágrimas!
30 de enero a la(s) 23:06
Respuesta del director de http://www.todosesupo.com, publicada en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Germán, no fuiste el único. Verás que si amagué en publicarlo o no: me parecía muy lacrimógeno, pero después de someterlo a la opinión de las personas más cercanas a mí, le dí el click de publicar. La idea de todosesupo.com es hacer periodismo de proximidad, mostrar la gente anónima de nuestro pueblo y que nos den ese mensaje de que los sueños son posibles hacerlos realidad: la clave está en que no nos los dejemos robar. De nuevo, mil gracias, mi pana.
Ayer a las 10:49
Comentario de Nubia Arias Aristizábal, publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Qué bien que estas cosas le pasen a personas que realmente lo necesitan; gracias Juan de Dios por ser portador de noticias buenas.
31 de enero de 2014 las 5:52
Comentario de Caballo Je, publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Mil felicitaciones para esta familia, se lo merece. Cosas tan bonitas como esta es que hacen grande una familia.
31 de enero de 2014 a las 6:28 horas.
Comentario de Cicely Alondra Cicely, publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Que bien se les cumplió su sueño felicitaciones y disfruten su casa.
31 de enero de 2014 a las 8:16 horas.
Comentario de Germán Cárdenas Osorio, publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Juan De Dios, ¡excelente artículo, son de los que le llegan a uno al alma y lo regocijan! Un abrazo.
31 de enero de 2014 a las 10:59 horas.
Comentario de Ramiro Montoya L., publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Dice un refrán: tener casa, no es riqueza, pero no tenerla, si es mucha pobreza. Felicitaciones a los ganadores, a disfrutarla.
31 de enero de 2014. 14:00 horas.
Comentario de Mario Casas, publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Esta es una manera simple de distribuir riqueza. Gracias, familia Tovar, gestores del Supermercado Belalcázar.
Me sueño con que esta idea de entregar entre sus clientes una casa cada año fuera retomada por todas las empresas del municipio de Yumbo (no sólo los mercados o almacenes, no, TODAS) y donaran una casa cada año para los humildes de Yumbo, los sin casa.¿Qué significa el costo de una casa con relación a los ingresos de un año de las empresas? Creo que no afecta su rentabilidad pero si su imagen, y que decir de la felicidad de todos los que como Edward verían cambiada para bien, su vida y al de su familia!.
La imagen del Supermercado Belalcázar sí que se incrementa por esta acción…, y bien merecida. Gracias. Yo estaría feliz de ver llorar a moco tendido a Germán viviendo una ilusión como esta.
1 de febrero 2014. 11:00H
Comentario de José Libardo Peña Valencia, publicado en el perfil de Facebook del director de todosesupo.com: Primo felicitaciones
30 de enero de 2014 a la(s) 19:02 horas-
Comentario de Mercedes Moreno, publicado en el perfil de Facebook del director de todosesupo.com:
Felicidades; qué bendicion…, que la disfruten
30 de enero de 2014 a la(s) 22:29 horas.
Comentario de Carlos Alberto, publicado en el perfil de Facebook de José Libardo Peña Valencia:
Qué bueno; me alegro mucho, es una gran bendición…
30 de enero de 2014 a la(s) 19:45 horas.
Comentario de Liliana Taborda Valencia, publicado en el perfil de Facebook de José Libardo Peña Valencia:
Te felicito primo, te lo mereces. Dios te bendiga aún mucho más, y tienes una hermosa familia.
31 de enero de 2014. 23:30 horas.
Comentario de María Gómez, publicado en la página de Facebook de todosesupo.com:
Qué bueno, felicitaciones, que la disfruten.
30 de enero a la(s) 20:38.
Comentario de Germán Cárdenas Osorio, publicado en la página de Facebook de Yumbo mi pueblo natal:
Viejo Mario, qué excelente idea has lanzado y es muy viable a través de alguna Secretaría de la alcaldía o Instituto descentralizado. Las empresas de Yumbo debieran sensibilizarse más con los habitantes del municipio y retribuir en algo las grandes utilidades que obtienen anualmente. Imagínate Mario, ¿cómo sería la llorada, uno viendo a 2000 habitantes de Yumbo recibir su casita en un diciembre? A propósito no sé si estoy errado, pero Yumbo no tiene un barrio llamado barrio industrial. Ese podría ser el nombre del barrio.
1 de febrero de 2014 23:38