Nota del director. Pastor López, el venezolano que puso a bailar a los amantes del género musical tropical, falleció a la edad de 74 años en Cúcuta, ciudad en la que residía. Él tenía la doble nacionalidad colombo-venezolana.
Los yumbeños tuvieron la oportunidad de disfrutar en vivo el talento de Pastor López en octubre del 2014, en el XXI Encuentro de Intérpretes de Música Colombiana “Julio César García Ayala”. Como un homenaje al fallecido artista, reproducimos la nota que el gestor cultural Wirley Cabrera escribió para www.todosesupo.com y que publicamos el 4 de noviembre de 2014.
El Hijo Ausente
Por Wirley Cabrera para www.todosesupo.com
Impecablemente vestido, el indio Pastor López acepto cortesmente un breve encuentro con nosotros, mientras discutía con uno de los organizadores del Encuentro y su director musical, el paradero de dos de sus músicos.
En 52 años de trayectoria musical, jamás había tocado suelo yumbeño, y se encontraba algo nervioso por aceptar el reto de subir y deleitar con su cumbia sabrosa a una tarima y publico exigente como lo es del Encuentro de Intérpretes de Música Colombiana “Julio César García Ayala”.
Echando broma como siempre, inició nuestra conversación refiriéndose con respeto a la belleza de nuestras mujeres: “Mira, estoy muy contento de estar acá, ante este pueblo tan maravilloso, gracias por tu saludo, y déjame decirte que vengo soltero y dispuesto a conseguirme una novia yumbeña…”
En ese instante acomodó sin prisa uno de sus tantos anillos que resguardan sus nudillos mestizos, y sin ningún afán, saludó efusivamente al barranquillero, periodista de la farándula tropical, hijo adoptivo de la Sultana del Valle, Montedgardo. “Llevamos más de cuarenta años de amistad, ¡pero, mira ya! Estás usando peluca, este no es tu afro original”.
Pastor en tarima
Ya en tarima el indio Pastor López hizo vibrar con sus cumbias y demás ritmos tropicales a los miles de asistentes al parque Belalcázar, que corearon y bailaron sus grandes éxitos como: Lloró mi Corazón, Golpe con Golpe, Sólo un cigarro, Brisas del Valle, Sorbito de Champagne, Las Caleñas, y por supuesto El Hijo Ausente, que hizo aflorar algunas lágrimas por la nostalgia. No dejo de lado tampoco su efusivo saludo a la ciudad que lo acoge permanentemente, Cúcuta.
Al final de su presentación nos regaló unas últimas palabras. “Un saludo de Navidad y Año Nuevo para la gente del portal todosesupo.com y todos sus visitantes”, convirtiéndose ahora en leyenda viva, sin ser ya el hijo ausente del Encuentro de Intérpretes de Música Colombiana.